La Selva Negra es un macizo montañoso con una gran densidad forestal ubicado al suroeste de Alemania.
Hoy en día se conoce la Selva Negra como un lugar turístico natural.
El río Kinzig marca la frontera entre lo que se denomina "el norte de la Selva Negra".
El clima es montañoso, las temperaturas crecen algo en verano y bajan en invierno, pero las diferencias son irrelevantes, debido a que el bosque regula con eficiencia los cambios de temperatura.
Una de las delicias más conocidas de la cocina alemana, es la tarta de la Selva Negra, que está elaborada con crema, chocolate, y frutos procedentes del bosque.
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